Lo Introvertido de Gaudí

Antoni Gaudí fue un arquitecto español. Nacido en Catalonia quien luego de estudiar se traslada a Barcelona, donde se gradúa de arquitectura en 1878 y realiza su vida profesional. Cuando estudiaba arquitectura, ayudaba a sus profesores como dibujante. Un dato interesante en la historia de este arquitecto es que su inicio de su carrera profesional coincide con la llegada de la luz eléctrica a Barcelona (1883), tiempo que aprovecho para diseñar iluminación, tanto así que trabajo la iluminación de varias plazas entre ellas; Pla de Palau y la Plaza Real (1879). Estos eventos le dan a Gaudí la oportunidad de darse a conocer, popularizarse y desarrollar diversos proyectos, en diferentes áreas como cooperativas laborales, cines, bares y restaurantes, así como el diseño de mobiliario, lámparas y escaparates. Para esa época estaba influenciado por la arquitectura oriental reemplazando lo aprendido con sus profesores del historicismo y el romanticismo, aun siendo un soñador inspirado en el catolicismo y la naturaleza. Su primer proyecto de envergadura fue la Casa Vicens (1883-1888)

La obra de Antoni Gaudí se clasifica dentro del movimiento modernista catalán, se caracterizaba por las curvas onduladas y texturas de colores vivos lo que ganó reconocimiento y popularidad a mediados del siglo XX. Logró desarrollar un estilo único al mezclar elementos del arte Gótico, ate moderno y estructuras funcionales. Sus formas favoritas eran columnas inclinadas para agregar tensión a los techos, arcos paraboloides delgadas bóvedas de azulejos con bordes a tope y las texturas más ricas y coloridas posibles, a menudo mosaicos hechos de restos de azulejos rotos incorporando decoraciones artesanales. Tenía su propio estilo y nunca hacia planos, solo usaba modelos 3D. Sus obras tenían figuras geométricas y las superficies eran de ladrillos o piedras con azulejos de cerámica brillante y orfebrería. Gozaba de hacer mosaicos y utilizar un sistema de columnas inclinadas, no le gustaban las líneas rectas, porque creía que la naturaleza tiene formas. Para reforzar la estructura empleaba el acero. Gaudí se dedicó a la construcción de la Catedral de Barcelona y trabajaba imágenes religiosas por lo que lo conocían como "el Dios de la Arquitectura". Pensaba que la naturaleza misma le daba sus herramientas para hacer obras nuevas ya que el arte emana del Creador. Los colores no siempre dan el enfoque o representa lo que quieres presentar. Por todas sus convicciones desarrolla su capacidad de romper moldes y crear nuevas soluciones.

La Casa Calvet (1898-1900) también está relacionada con su época temprana, es la más conservadora realizadas en estilo barroco. Luego estaba la Casa Batlló (1904-1906), la única obra 100% modernista de Gaudí, inspirada en el mar Mediterráneo. Dentro de su esta etapa profesional la Casa Milà (1906-1912), concluye su colaboración con la burguesía. El modernismo en Barcelona logra su expresión plena en la arquitectura ya que queda expresada en las culturas y las artes presentando mucho color en todo su esplendor. Su mayor obra y quien lo perpetuo fue el Nacimiento de la Sagrada Familia, a pesar de que no pudo finalizarla. Esta obra fue trabajada por fases; la construcción de la cripta (1883-1891) y el ábside (1891-1893), ya que simultáneamente mezclo el trabajo del templo con los trabajos antes mencionados. Al presente, su obra es reconocida internacionalmente y sus postulados y concepciones influenciaron la arquitectura de todos los tiempos.

La arquitectura, así como otras ciencias continúan evolucionando a medida que el humano y la tecnología avanzan. Vemos como hemos sido influenciados por las diversas aportaciones, la necesidad de ser autosustentable, ser funcional, maximizar recursos y, por supuesto, la evolución de la construcción misma. Estos cambios en diseño de líneas, formas y materiales juegan una parte importante de lo que el arquitecto tiene que considerar al momento de desarrollar un proyecto.